REGANOSA ADJUDICA LA PUESTA EN VALOR DE LOS RESTOS ARQUEOLÓGICOS DE CALDOVAL

09/01 2014

REGANOSA ADJUDICA LA PUESTA EN VALOR DE LOS RESTOS ARQUEOLÓGICOS DE CALDOVAL

  • - La iniciativa, que dota a Mugardos de una infraestructura cultural de primer nivel, es fruto de la actuación conjunta de Xunta de Galicia, Concello y Reganosa.
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  • - Los trabajos se iniciarán a principios de octubre y se prolongarán durante catorce meses.
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  • - Antes de construir la cubierta del centro, se ubicarán mediante grúa las piezas más grandes del yacimiento, que, por sus dimensiones, sería imposible introducirlas una vez que el edificio estuviera cerrado.

 

Reganosa ha adjudicado la puesta en valor de los restos arqueológicos de Caldoval, por lo que los trabajos comenzarán a principios de octubre para concluir catorce meses después. Se trata de una iniciativa conjunta de la Consellería de Cultura, el Ayuntamiento de Mugardos y la compañía. Ésta, además de aportar los más de 2,5 millones de euros precisos para ejecutar el proyecto, se ocupa de gestionar la obra.

El yacimiento romano de Caldoval está situado en el lugar de Punta Promontoiro. Fue catalogado y protegido en 1997. Las excavaciones llevadas a cabo por cuenta de Reganosa pusieron de manifiesto la existencia de dos conjuntos diferenciados: por una parte, se distingue un canal excavado en roca y una serie de estancias orientadas a la costa, cuyo uso podría estar vinculado a tareas relacionadas con el comercio, y, por otra, un balneario rural doméstico que cuenta con una palestra para la práctica del deporte. Este conjunto, que estuvo en uso entre los siglos I y V después de Cristo, se extrajo para su reubicación en el centro de interpretación.

Los trabajos de puesta en valor de los restos de Caldoval comprenden la ejecución simultánea de un edificio para centro de interpretación, la musealización del material arqueológico y la urbanización del entorno. Esta actuación coordinada a través de un único constructor permitirá mejorar la gestión de una construcción compleja como la que se aborda.

Las operaciones comenzarán con la preparación de la parcela, de 10.500 metros cuadrados, y la excavación, en la que se moverán unos 8.000 metros cúbicos de tierra y roca. Esa superficie, de propiedad municipal, está ubicada en el Camiño do Cemiterio, dentro del casco urbano de Mugardos. Una vez efectuada la fase inicial, será necesario adaptar el fondo del solar a la topografía del yacimiento, labor que será clave para la correcta reconstrucción.

El edificio se compondrá de dos niveles en altura, con una superficie total construida de 1.600 metros cuadrados. En la planta superior, de unos cuatrocientos metros cuadrados, irá la zona de servicios del centro, mientras que en el piso inferior estarán el área de acogida de visitantes y la exposición del yacimiento. En las estructuras del edificio se emplearán 2.500 metros cúbicos de hormigón para los muros, además de 800 metros cuadrados de prefabricados del mismo material para el forjado de la cubierta y unos 70.000 kilos de acero laminado.

El arquitecto Alfonso Penela diseñó el proyecto. Se trata de un edificio en el que las ruinas son el actor principal, acercándose a la idea de un mausoleo, más que a una sala de exposiciones al uso. Así, la obra, sobria, digna y austera, se resuelve con una sola decisión: un muro que, en forma de espiral, lo construye todo. La espiral se va enterrando para devolver las ruinas a la tierra y de esta manera situarse en la cota primigenia, ausente de interferencias exteriores. En superficie, el acceso al museo y unos lucernarios emergen del edificio e inducen a bajar a través de una rampa muy suave, que dirige, entre los muros de hormigón, hacia la “cripta”. En ella, el suelo se hunde y cambia para acoger las ruinas romanas. Una pasarela permitirá observar las ruinas desde una posición elevada.

A medida que se levante la estructura del edificio, y antes de ejecutar la cubierta, se ubicarán mediante grúa las piezas más grandes del yacimiento, que, por sus elevadas dimensiones, sería imposible introducirlas una vez que el edificio estuviera cerrado. Todo el conjunto ocupará unos seiscientos metros cuadrados. Una vez finalizada la estructura y la cubierta del centro –que tendrá una parte ajardinada- se acondicionarán las instalaciones y los revestimientos y acabados, hasta terminar la obra. Los trabajos en el edificio se completarán con la reconstrucción de la edificación romana y los trabajos de musealización.

En el exterior del nuevo centro de interpretación, sus tres promotores, Xunta de Galicia, Concello de Mugardos y Reganosa, decidieron acondicionar el entorno con aceras, viales, aparcamiento, una pradera de 6.400 metros cuadrados y un bosque de abedules. Estos trabajos comenzarán a medida que vaya finalizando la construcción del edificio.

Además de dotar a Mugardos de una infraestructura cultural de primer nivel, la puesta en valor de los restos de Caldoval también constituye una contribución al mercado de empleo local, ya que se requerirán 31.300 horas de trabajo hombre, con puntas en las que coincidirán trabajando veinticinco personas.

Reconstrucción y musealización de los restos.

El objetivo de Xunta, Concello de Mugardos y Reganosa es la reconstrucción de los seiscientos metros cuadrados de yacimiento extraídos de Caldoval, que se completará con el apoyo museográfico en el que se prevén actuaciones encaminadas a la comprensión del conjunto histórico. Entre otras, la recreación de ciertas estancias y proyecciones estereoscópicas que permitan al visitante transportarse al antiguo mundo romano.

La reconstrucción del complejo estará formada por un balneum rural doméstico con palestra. En dicho complejo el visitante podrá apreciar las diferentes estancias que lo componen: un distribuidor o apodyterium, un baño de agua fría o frigidarium, un baño de agua caliente o caldarium, dos habitaciones o hipocaustos, la palestra que conserva algunos de sus pilares y un canal para la evacuación de aguas.